viernes, 11 de octubre de 2013

CRONICA DE HOYA GONZALO, memorial Samuel Andújar

De nuevo, Hoya Gonzalo, y yo, como único representante de los veggierunners (otro año más), aunque, esta vez los demás tenían buena excusa: Javier Hidalgo hacía la media maratón de Alicante y Fabricio la carrera de Botamarges, de 63 km (http://runner-fabri.blogspot.com.es/2013/10/v-botamarges-carrera-por-montana.html?spref=fb).

Esta vez llegué a Hoya Gonzalo con mi amigo Pepe León y ya se notaba el ambiente, muy bueno. Recogimos los dorsales, la bolsa de corredor, los saludos de rigor a compañeros y compañeras de otros clubes. Risas, muchas risas.

Empezamos a calentar, yo contento de estrenar unas zapas nuevas, Pepe y yo hablamos de objetivos, de zapatillas, de entrenos, de corredores a batir, de corredores que no podemos batir (imposible). Falta media hora y mi objetivo es bajar el tiempo del año pasado, sé que lo tengo fácil ya que la pasada convocatoria iba lesionado y "volé" a 6 min el km. Pero digamos que esta carrera quería probarme, ver hasta donde podía llegar. Mis últimos entrenos me han ido bien y a pesar de ser una carrera dura por el perfil, la afronto con ánimo de ver hasta donde puedo llegar.



Ya sólo faltan 20 minutos y hago estiramientos dinámicos (como siempre me dice Fabri). Ya estoy listo (estamos), nos acercamos ya a la salida y mucha gente. Esta edición de la carrera va a pasar a ser "MEMORIAL DOCTOR SAMUEL ANDÚJAR NÚÑEZ" médico del circuito de carreras populares (fallecido hace meses) y amigo de todas las personas que participan en él. Es por ello, que esta carrera no fue solo eso, una carrera, sino que además fue un emotivo acto de  reconocimiento a la figura de Samuel.


Su mujer obtuvo el cariño de todos los participantes y el club de Hoya Gonzalo le entregó un ramo de flores. Después un aplauso que parecía que duró horas. En fin, muy emotivo repito.

Inmediatamente se da el disparo de salido y me concentro, empieza la prueba y quiero verme bien. Salimos bien, mucha gente, hablas con uno, con otro, risas, tensión y llega el km 1, a 4:45, mmmmmmm! es rápido para lo que viene después, aflojo y ya para el km 2 voy a 5 min y ya empieza la cuesta, bufff no me acordaba lo larga que era, pero ahí sigo, voy bien, y mucha gente se queda atrás. Corono la cima agotado pero con fuerzas todavía, comienza la cuesta abajo y me dejo caer, me noto bien, las rodillas no molestan pero la respiración la llevo acelerada. Entramos al pueblo y una mujer (que no conozco) me anima con mucho entusiasmo, pasamos por el centro del pueblo y la gente no para de animar y aplaudir, lo que me hace subir más todavía el ritmo.

Vamos saliendo del pueblo y veo el km 6, me miro y, 30 min., voy a 5 min el km. Me animo pues solo quedan 4 km para acabar la prueba, pero lo más duro. Al poco me pasa un atleta de Montealegre runners, me pregunta por Fabri y su carrera de Botamarges, le digo que muy bien (me faltaba el aire para decirselo jeje) y me dice: "dale recuerdos, soy Paco" (pues eso, Fabri, recuerdos de Paco de Montealegre). Vuelvo a la realidad y veo el comienzo de la cuesta e intento mantener el ritmo, lo intento pero veo que me fallan las piernas (falta de fuerza), en fin, no me desanimo, pues sé que todavía me falta mejorar y es cosa de tiempo asi que, intento mantener un ritmo aceptable, la gente se para, los animo y, llega el fin, la cuesta abajo, me vuelvo a dejar caer y a "volar", alcanzando a varios corredores.
Con estos corredores llego al pueblo y en ná, la recta final, ostras!!! no me acordaba que acaba en cuesta, pequeña pero en cuesta jaja, intento apretar, bueno, mantener el ritmo. En los últimos metros me adelanta una mujer y yo no llego a alcanzar al que tenía delante. Llego a meta y levanto el brazo, cansado, muy cansado y miro el reloj: 51:55 minutos. Estoy cansado, contento, muy contento de como me ha ido la carrera.

Sé que he fallado en los últimos kilómetros, pero lo veo lógico y coherente, así que, respiro hondo y voy al refrigerio. Naranja, mucha naranja, me está buenísima. También frutos secos, almendras y almendras. En ná veo a Pepe, dice que le he engañado, que la cuesta era más dura de lo que le había dicho, me rio, pero esta contento pues ha hecho buen tiempo. Eso es lo importante, seguimos con el refrigerio, hablamos con la gente, risas y risas y decidimos irnos para Albacete. Nos despedimos y nos vemos para la media maratón de Hellín (dicen que la más dura del circuito).
Allí nos vemossssss!

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