domingo, 9 de septiembre de 2012

I Carrera popular de Villaverde de Guadalimar


Villaverde de Guadalimar es un municipio de la provincia de Albacete, en la comarca de la Sierra de Alcaraz, que se encuentra a 125 km. al suroeste de la capital de la provincia. Parte de su término se integra en el Parque Natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima. El terreno que ocupa el municipio es montañoso, donde destacan el macizo del Padrón (Pico de La Sarga, 1.769 metros) al norte, el Padroncillo (1.587 metros) al este, y la Piedra del Cambrón (1.552 metros) al oeste.

Era la primera vez se corría en esta población dentro del Ciruito de Carreras Populares, organizado por la Diutación Provincial de Albacete y existía expectación por conocer el recorrido. Varias causas provocaron un escaso número de inscripciones, alrededor de 150 corredores/as: una de ellas que es una localidad lejana a la capital –125 km–, la otra que ésta se se ha programado en una fecha en la que se celebra en Albacete sus fiestas locales que atraen a gran parte de corredores de la provincia.

De nuestro equipo tan sólo asistió Javier Hidalgo, sus compañeros de equipo son más festivos que éste y por “razones personales” excusarion su asistencia. Ellos se lo perdieron. Personalmente opino que es una de las carreras de montaña del circuito provincial más bellas por su paisaje, pues transcurre en su gran mayoría por la sierra y en su recorrido se pueden ver el Padroncillo y el calar de la Sima. Después de un pequeño recorrido por las calles de la localidad, se dirige por una pista forestal en muy bien estado fundamentalmente llana hasta llegar al pk. 5, donde unos dos kilometros y medio de constante subida llevó a coronar un monte cercano. El desnivel no superaria los 250 m. pero se acusan. Afortunadamente el día anterior había llovido y correr rodeados de árboles era una auténtica delicia, aunque un último tramo lleno de barro, dificultaba correr con excesiva alegría. A partir de ahí se sucedían los típicos toboganes de las carreras de sierra, aunque predominaban los descensos. Todo ello con una temperatura ideal para correr, en torno a los 23º.  Los recortes económicos se notaron en la bolsa, aunque tenía el bien tan preciado de incluir una botella de aceite de oliva (la zona está poblada de olivos, y por tanto son productores de este dorado alimento). También el avituallamiento fue pobre: melón y agua. Lo peor fue la falta de agua en las duchas del campo de deportes, producida por una avería, por lo que los corredores tuvieron que asearse como antaño, en el pilón.


Javier Hidalgo quedó el 8º de su categoría y el 86º de la clasificación general. Su tiempo 1:03:23 con una media de 4,57 el km.

No hay comentarios:

Publicar un comentario