CRONICA DE UN FINDE COMPLETO

El sábado 7, como marca la tradición veggie, cogimos marcha la expedición albacetense en dirección a Robleluengo (Guadalajara), a pasar un finde, de carrera (media maraton de montaña del Ocejón), IV asamblea de la UDV y convivencia con los demás veggies asistentes y acompañantes y familiares.

A eso de las 7:30 (algo mas tarde), con mucho sueño, partimos hacia nuestro objetivo y, tardamos cerca de 4 horas en llegar. Hay que tener en cuenta, la parada técnica para almorzar y las dos paradas técnicas posteriores (necesidades humanas).

Como ya es la III media que hacemos, sin entretenernos, nos dirigimos a la zona de acampada, 5 segundos en montar la tienda y, algo más en dejar los trastos y... a ver a los demás compas que ya estaban en la plaza esperando para comenzar la asamblea, abrazos, besos, mas abrazos y más besos.

Cuando ya estábamos más o menos y, pasadas las 13:00, comenzamos con la asamblea. Algunos, los más ansias, habiamos comido ya, otros comieron durante la asamblea y los menos, después de ella... Para resumirla en pocas palabras, buen ambiente, buenos comentarios y buenas perspectivas de futuro (ideas, proyectos y ganas de tirar palante), que es lo importante.

Fabri, Juancar y yo, nos vamos a prepararnos (Juan Carlos ya estaba a tope). Descansamos una miaja bajo la sombra de los árboles y... ya empiezan a aparacer corredores. Media hora y empezamos a estirar algo, las fotografas oficiales de la UDV entran en acción y, cuando ya estamos todos los veggies... FOTAZA:

Ya después, no lo recuerdo muy bien, nervios, prisas por calentar, por estirar, risas nerviosas... nos separamos cada uno se concentra y... en poco tiempo ya nos encontramos en la salida. 

Fernando nos indica algunos cambios, nos abrazamos, nos deseamos suerte, al lio y... EL CENCERRRRRRRRRRRRRRRRO.

Algunos deciden apretar los primeros kilómetros antes de empezar la subida, otros deciden reservar y ya se verá. Yo me encuentro entre los primeros y, allá que voy con Felix, Luis y Nicole. El grupo de cabeza veggie, lo forman, Fabri, Eze, Tony y Carlicos, el resto no lo sé, pero viendo que no iban delante, deduje que iban detrás ("muy buen razonamiento Rubén"). 

Tiramos y tiramos, voy cómodo y lo que quiero es (ya que en las subidas, suelo ir lento), adelantar todo lo que pueda en estos kilómetros y ya se verá. Pero (siempre hay un pero que te jode la idea), empiezo a notar el calor y el primer avituallamiento es en el km 6, antes de la subida. Confío en mi y pienso aguantar. en el km 4, sigo viendo a Felix a unos metros de mí, Luis y Nicole me adelantan y van con él. Me voy quedando seco seco y cuando llego al avituallamiento voy desfallecido, bebo y bebo para hidratarme y, aún así, creo que esta deshidratación la pagaré cara. 

Efectívamente, me veo que se me van cargando los cuadriceps y en ná voy seco otra vez (mierdaaaaa!!!!), así que toca sufrir (pinta así la cosa). Llego al primer avituallamiento y SuperPatri y Javivegano llegan conmigo. Sigo yendo seco, bebo, bebo (Javi y Patri siguen), me tomo un gel, me sigo hidratando y un poco de plátano. Y comienza la subida al Ocejoncillo, se hace dura, muy dura, la gente me sigue adelantando, pero el caso es no mirar atrás y seguir. Veo el Ocejón, mucha gente, los que bajan, animan y se agradece (qué buen ambiente de voluntarios y corredores, ya ni me acordaba), al poco me veo a los veggiesenderistas que me animan y me echan unas fotos chulas chulas, Pedro me grita desde atrás, me alcanza y sigue. Ya no queda nada, empiezan a bajar los primeros veggies, todos van bien (eso parece), nos animamos. Un corredor que baja me da su agua, que me vino, como agua de mayo (en este caso de junio) y, cresteo y llego al vértice geodésico. 

Bebo agua, me hidrato y, lo importante, estiro y estiro que tengo las piernas muy muy cargadas. Al terminar me lanzo pitando para abajo. Me encuentro mejor y eso hace que parezca que vaya volandooooo. Saludo a los demas corredores que suben, Juancar sube, cansado pero con ganas. El senderísta Edu, me echa una fotaza:

Veo de cerca a Patri y Javi, sigo bajando intentando no torcerme nada, pero, ZACAAAA! Se me tuerce el tobillo, pero sigo, parece que no es nada... Alcanzo a Patri y Javi y llego solo al Ocejoncillo... sigo y sigo, no veo a ningún corredor más, llego al siguiente avituallamiento y sigo SOLO, nadie detrás, nadie delante. La cosa se me hace aburrida y, al ver que voy solo (solo solo, como el llanero solitario), me empiezo a desanimar, miro el reloj, voy justo de tiempo para mejorar, las piernas me flaquean, paro y estiro, sigo (solo) hasta llegar a Majaelrayo, ya no queda nada. Último avituallamiento, voy reventado (y solo, nadie delante, nadie detrás, qué sensación). Me quedan 3 kms y me animan los voluntarios y miro el reloj: 2:45:00. Tal como voy, no creo que haga los 3 kms en 15 minutos, así que ya tengo claro que no bajo marca. Ahora sólo es llegar (vivo y entero). Qué sufrimiento!!! último kilómetro y me tengo que parar, las piernas no van, qué sensación! Una chica me dice, que en nada me está esperando "la Gloria" y, quien es esa chica? últimos metros y la gente anima, me apetece pararme a descansar, pero no, hago un último esfuerzo y veo ya la meta, Fernando animando y los veggies que han llegado antes, animando como locos, qué bien!!!! Fernando me abraza y me felicita.

Estoy en un nivel de reventamiento del 5, más o menos, Fabri, Tony... me abrazan, me felicitan y... miro el reloj y 3:03:00 clavadito. Miro hacia la montaña, hacia el Ocejón y pienso, me vas a hacer venir el próximo año otra vez para que mejore mi marca.

Me descalzo, me hidrato y charlo con los demás y nos contamos las sensaciones y experiencias. Fabri y Tony, los primeros veggies en entrar y mejorando marca. En general, todos contentos, cansados, muy cansados pero contentos.

 

Nos echamos una foto otra vez todos con la veggiepancarta, donde salimos más guapos y guapas que en la de la pre carrera

Después, pues lo de siempre, duchita fresquita, cena en buena compañía, entrega de premios (con premio incluido para el club), risas, cervecitas, coliflor con ajetes, tortilla vegana de Felix, más cervecitas, risas, cachondeo, algún amago de baile y, se hacen las 3 de la mañana. A dormir y al día siguiente, desayuno en las casas de Majaelrayo y despedida hasta la próxima veggiequedada.

Un fin de semana muy muy completo