Otro año repito esta carrera. Es chula
chula chula, pues se recorre parte del parque natural de las Lagunas
de Ruidera y encima, en esta estación (otoño), da gusto estar en
este entorno.
Este año, viajamos Fabri y yo, pero
sólo un valiente (es decir, yo) iba a correr, pues Fabri seguía
tocado del soleo y … debía descansar. Yo, como todos sabeis, sigo
con mi problema de tendinitis y no iba a apretar en la carrera sino a
“lucir” la veggiseta.
Vamos acercándonos y vemos que empieza
a llover, ¡bien! Mola correr lloviendo y encima en plena naturaleza,
yahooooo!
Llegamos por equivocación, al camping
de las Lagunas de Ruidera, con tiempo de antelación, así evitamos
el atasque de coches. Recojemos el dorsal y saludamos a la gente de
siempre corredor@s y acompañantes (Maria Elena y Jesus, Javi, compas
que ni sabemos sus nombres...). Fabri va a ser el fotógrafo oficial
y, me va indicando los lugares donde se iba a poner, para que yo
saque mi mejor pose jeje.
Media hora antes, empieza a llover,
suave, pero a llover, este año el recorrido se ha aumentado en dos
metros (10002 m), por la sencilla razón, que donde se coloca el arco
de salida, hay un gran charco que ocupaba casi todo el camino, por lo
que se retrasó, para que pudieramos salir más o menos bien. Empiezo
a calentar y me siento cómodo con la temperatura (5-6 grados), Fabri
se despide de mi y voy colocandome en la parte trasera. La musica
empieza a sonar y la gente se va animando. Veo a Javi (un compa de la
universidad) y hablamos y reimos y, de repente veo a Paco (un compa
de carreras) y decidimos ir juntos (bien! Así no me pico).
Pistoletazo de salida con una música
cañera (qué subidón!), pero al salir... el gran charco, despacito
despacito por los laterales del charco. Empiezo con Paco hablando
tranquílamente, salimos del camping y … la lluvia sigue cayendo,
despacio, pero cayendo. Al poco de salir del camping, oimos a alguien
gritar, no, no es Fabri, pero al instante lo veo, Paco y yo,
levantamos los brazos y yeaaaah! unas fotos chulas chulas jeje
Pasamos los dos primeros kms y ya nos
acercamos a las primeras lagunas (tinaja...). Miramos el reloj y,
puffff 12 minutos, a 6 el km. Vaya, vamos muy tranquilos, pero
empezamos a acelerar sin darnos cuenta, hablando de los proyectos de
fracking que hay en los alrededores de las lagunas y el campo de
montiel, de los tipos de vegetación que hay en el parque, de
entrenamientos, de próximas carreras, en fin, disfrutando. Al km 4,
empezamos a cruzarnos a los primer@s corredor@s y... empezamos a
saludar y a saludarnos, de repente veo a gente con la que yo solía
ir, bueno, gente que en las competiciones va a tu ritmo y, pufffff me
entra un poco de bajón, bueno, bajón no, es algo así como
impotencia de pensar, “vaya, yo debería estar ahí”, pero
recapacito y objetivamente, pienso que es lo mejor, ya los pillaré
en las próximas carreras (“arrieritos somos y en el camino nos
encontraremos”) jeje
El ver a tantos amigos y amigas
cruzarnos, creo que nos da alas y sin darnos cuenta empezamos a
acelerar, seguimos bordeando lagunas (la Tomilla y la Tinaja), la
lluvia nos da en la cara, el paisaje mezclado de sabinas, encinas,
chopos... es alucinante y entre bromas y bromas se acerca la cuesta
de 200 metros (a 1 km del final). Metemos la primera y la reductora,
la gente nos anima bastante y, de repente cuesta abajo hasta el
camping. Nos dejamos caer y, a 500 metros de meta Paco se para (los
cordones se le han soltado) y me dice que tire, así que, le hago
caso y me dejo llevar, empiezo a adelantar gente y justo antes de
entrar al camping, otra vez, Fabri echando fotos, jeje (aquí iba
algo forzado y creo que no salí tan “guapo”) y, nada mas, llego
a meta. Miro el crono y bueno, para no haber apretado, no está mal:
y a 5,36 el km. Cansado del esfuerzo final, pero contento, las
rodillas bien o, por lo menos me han respetado.
Abrazo a Paco y ale, a tomarnos algo en
el piscolabis, cambiarnos, estirar y a casa.
Una carrera muy guapa, por el entorno e
ideal para lucir la veggiseta y por el Don Quijote que se quiso echar una foto conmigo.
Dar las gracias aquí al fotógrafo
oficial, que a pesar de estar lloviendo y no llevar paraguas, estuvo ahí animando al personal.
Más fotos de esta carrera:
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| Ossa de Montiel 2012 |
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